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Aclarar
con la administración competente en la materia las
exigencias y contenido del estudio de minimización
de residuos peligros. Como se ha expuesto anteriormente,
las distintas Comunidades Autónomas tienen criterios
diferentes respecto a quién y cómo debe presentar
los estudios de minimización.
Determinar la situación de la empresa respecto a
la producción de residuos. De una correcta identificación
y gestión de residuos dependerá la eficacia y utilidad
del estudio de minimización. Si la empresa cuenta
con un sistema de gestión ambiental implantado en
el que se contemplen procedimientos operativos relacionados
con los residuos, el estudio de minimización podrá
basarse en la documentación existente, pudiendo
incluirse entre las tareas del sistema de gestión
ambiental. |
Si, por el contrario,
la situación de partida es una empresa sin sistemas
de gestión ambiental y con escaso conocimiento sobre
los residuos, el punto de partida es la correcta identificación
y clasificación de los residuos generados.
A partir de aquí, cada empresa deberá ser consciente
de lo que pretende conseguir con la elaboración de un
estudio de minimización y los recursos de que dispone
para realizarlo.
Si la única intención
de la empresa es dar cumplimiento al requisito legal,
bastará con que recopile la información disponible sobre
sus residuos y la estructure en una memoria según lo
establecido por el organismo competente.
Ahora bien, la elaboración de un estudio útil requiere
de un análisis de las causas de generación de residuos
en los procesos y actividades de la empresa, una exhaustiva
clasificación de los residuos generados, la consideración
de los aspectos legales aplicables, la selección de
los tratamientos externos más adecuados para cada uno
de los residuos y el seguimiento de todos los elementos
de cara a un control efectivo que permita reducir al
máximo los costes de la gestión de residuos mediante
la minimización de su producción.
| Dependiendo
del tamaño de la empresa, estas tareas pueden suponer
una carga de trabajo más o menos elevada. Para aquellas
empresas que cuenten con un departamento de medio
ambiente, la ejecución y seguimiento de planes de
minimización debería de ser una de las tareas asignadas
a su personal. En empresas pequeñas, con plantillas
reducidas, la presencia de un profesional con formación
multidisciplinar sería altamente recomendable, ya
que podría asumir las tareas derivadas de la minimización
de residuos y compaginarlas con otras tareas de
gestión generan o relacionadas con el medio ambiente,
la calidad e incluso, la prevención de riesgos laborales. |
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Otra forma de afrontar la elaboración de un estudio
de minimización de residuos peligrosos es recurrir a
una empresa externa. Muchas consultoras y asesorías
en materia de medio ambiente ofrecen entre sus servicios
la elaboración de estudios, así como el diseño de planes
de minimización de residuos peligrosos. El mercado ofrece
un amplio abanico de posibilidades en este aspecto,
siendo una buena alternativa para descargar de trabajo
al personal de la empresa. Deberá valorarse el coste
y el nivel de adaptación a las necesidades concretas,
ya que el estudio de minimización podrá ser afrontado
desde por un profesional autónomo especializado en la
materia hasta por un equipo multidisciplinar de consultores
especialistas.
En cualquier caso, la subcontratación del servicio de
elaboración del estudio debería asegurar el cumplimiento
de los requisitos legales, aunque, el sistema de trabajo
del personal externo y la falta de un conocimiento profundo
de la actividad de la empresa, puede llevar al establecimiento
de planes poco ajustados y objetivos de minimización
poco realistas
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